Vitaminas y suplementos para el embarazo

Cosas como ingerir drogas o beber alcohol es muy peligroso para el futuro bebé. Todo lo que una mujer embarazada come, bebe y respira llegará al feto a través de la placenta.

Ante preguntas como: ¿Se deben incluir las vitaminas en una dieta a diario? ¿Cuáles son las recomendadas para las mujeres embarazadas? ¿Cuáles serán los efectos? 

A continuación una descripción detallada de las vitaminas y su aportación en durante el embarazo. 

  Vitamina C

Esta vitamina es importante en la formación de los vasos sanguíneos del bebé, los huesos y el esqueleto entero. Ayuda a producir colágeno, una proteína responsable de la producción de la base del esqueleto del producto. La vitamina C también se conoce como alimento para la piel, porque nutre y ayuda a construir una piel saludable. Como antioxidante, también es auxiliar en el combate de los radicales libres y retrasa el proceso de oxidación.

Debido a que el cuerpo humano no puede producir la vitamina C, a diferencia de la mayoría de los animales, y no puede almacenarla, es importante conseguir un suministro diario de vitaminas con suplementos y alimentos ricos en esta vitamina, tales como cítricos, hortalizas y frutas.

  Ácido fólico

Es otro nutriente necesario para la producción de glóbulos rojos sanos. No todas las madres reciben la cantidad suficiente.

El ácido fólico se encuentra principalmente en frutas y hortalizas frescas. En las personas que consumen una gran cantidad de enlatados o alimentos pre-envasados pueden llegar a ser deficiente. Las mujeres embarazadas que viven solas y no quieren cocinar para ellas mismas conformándose con los enlatadas están especialmente en riesgo de anemia causada por la falta de ácido fólico y nutrientes naturales.

Los expertos sugieren que algunas porciones de frutas y hortalizas frescas cada día son la mejor apuesta para la prevención. También se recomienda tomar un suplemento nutricional diario con 400 microgramos de ácido fólico (esto bajo la supervisión de su médico).

  Vitamina A

Una ingesta diaria de vitamina A también puede brindar salud a lo huesos, la piel y los ojos del futuro bebé, así como las células sanas necesarias para formar los órganos internos del bebé.

Sin embargo, las mujeres embarazadas deben hablar con sus doctores antes de complementar su dieta con vitamina A. Los estudios muestran que el consumo excesivo puede provocar defectos de nacimiento, como anomalías de los ojos, cabeza microcefálica , labio leporino y paladar hendido, hidrocefalia o ampliación de los líquidos en el cerebro, retraso mental y defectos del corazón.

Las estadísticas muestran que las mujeres embarazadas que consumen vitamina A en exceso, pueden provocarse anomalías congénitas en 1 de cada 57 niños. Además, una ingesta excesiva de esta vitamina durante el embarazo dar pie a un mayor riesgo de aborto involuntario.

  Vitamina D

Cuando los investigadores midieron los niveles de vitamina D en mujeres embarazadas, vieron que entre más vitamina D exista en la sangre, mayor será la insulina y glucosa en los músculos. Así que la vitamina D es un nutriente importante para muchas otras razones. Ayudar a producir dientes sanos, tejidos y huesos para el futuro bebé, además, puede ayudar al cuerpo a combatir la diabetes. Los estudios demuestran que la diabetes en mujeres embarazadas es muy arriesgada e incluso llega a causar defectos de nacimiento o la morbilidad.

Aunque la vitamina D se produce cuando la piel está expuesta a la luz solar, una fuente más fiable durante todo el año es la leche. Cuatro vasos de leche descremada todos los días pueden proporcionar la cantidad diaria recomendada.

  Vitamina B12

Facilita la formación de hemoglobina, el componente de glóbulos rojos de la sangre que transportan el oxígeno por el torrente sanguíneo. Durante el embarazo, aumenta el suministro de oxígeno. Y el feto también utiliza esta vitamina para construir su propio suministro de sangre.

El cuerpo materno necesita la vitamina B12 para crear glóbulos rojos. Este componente se encuentra en el pollo, carne roja, productos lácteos, huevos y pescado, pero no en los alimentos vegetales. Los vegetarianos estrictos están en riesgo de una deficiencia de vitamina B12 y anemia. La solución es tomar un suplemento diario nutricional que contenga este compuesto (el médico especialista recomendará la dosis adecuada).

Hay que tomar en cuenta que la salud del bebé depende de la manera en que las madres reciban la cantidad adecuada de vitaminas, por lo tanto, no pueden darse el lujo de escatimar. Las madres deben asegurarse de obtener los nutrientes suficientes todos los días.