¡Supera con éxito los malestares del embarazo!

“Estar embarazada es una experiencia maravillosa; sentir cómo crece tu hijo día a día te llena de energía y felicidad; sin embargo, existen algunos malestares como las náuseas y mareos, que te hacen sentir incómoda”, expresa María Hernández, una mamá primeriza.

No obstante, existen algunos consejos, que puedes poner en práctica para tener un embarazo tranquilo y saludable, señala Jessica Marcus, dietista de Brooklyn, y colaboradora en la Academy of Nutrition and Dietetics.

  Tu alimentación, la clave

La especialista detalla que todas las mujeres experimentan de forma diferente los síntomas, es decir, no todas tienen los mismos o la intensidad de éstos puede ser alta o baja.

Sin embargo, los siguientes consejos te ayudarán a disfrutar más tu embarazo y enfocar tu atención a los preparativos de la llegada de tu bebé, para brindarle una buena calidad de vida.

¡Acaba con las náuseas!

Consume porciones pequeñas de comida, de forma frecuente, así mantienes controlados los niveles de azúcar en la sangre.

No olvides beber por lo menos dos litros de agua al día, para mantenerte hidratada y que tu cuerpo funcione correctamente.

¡Adiós flatulencias, inflamación y estreñimiento!

En tu alimentación incluye fibra que proviene de granos enteros, frutas y verduras. Evita la ingesta de frijoles y otros alimentos que favorecen la producción de gases.

Realizar ejercicios de bajo impacto, como caminar, te ayudará a  tener una buena digestión.

Reduce la acidez y la indigestión

Evita el consumo de alimentos picantes o ácidos. Trata de mantenerte activa tres horas después de comer, si te acuestas, es más fácil que presentes estos síntomas.

Las náuseas y vómitos son comunes durante los tres primeros meses de gestación, si continúan, no dudes en visitar a tu médico para que te brinde un tratamiento adecuado.

Una alimentación balanceada y la práctica de ejercicio de bajo impacto durante el embarazo, son las claves para reducir la presencia de malestares, al mismo tiempo que le ayudas a tu hijo a tener un desarrollo físico y mental adecuado.