Estreñimiento en bebés

El estreñimiento es un trastorno que puede afectar por igual a niños y adultos, cuya principal características en la imposibilidad o dificultad para evacuar.

De manera particular, en los niños se presenta por lo general si retienen las deposiciones, lo cual sucede cuando no están listos para entrenar o controlar el esfínter, o bien le temen a esto.

Una de las señales evidentes de que un bebé está estreñido es cuando se vuelve nervioso e intranquilo. Se debe tener en cuenta que durante sus primeros meses de vida, la coordinación entre los movimientos de su intestino, así como la relajación del esfínter no es muy eficiente.

Los gases y los cólicos son inevitables cuando el bebé se encuentra en este estado. En estos casos, es normal que el pequeño levante las piernas y se ponga rojo para intentar empujar las heces.

Por lo que el estreñimiento en el bebé requiere una intervención rápida de los padres y del pediatra, para evitar que el problema se convierta en una molestia crónica, o que se complique. Cuanto más tiempo estén las heces en el colon del bebé, más secas y duras se volverán, y su eliminación será aún más difícil y dolorosa.

Remedios para bebés con estreñimiento

1. Si la leche que se le da le cae mal, puedes sustituirla por una leche anti-estreñimiento, adecuadas para aliviar el problema. Básicamente se trata de fórmulas adicionadas con probióticos o bacterias para fortalecer su flora intestinal.

2. El agua ablandará un poco las heces y evitará que sean retenidas en el colon del pequeño. Algunos pediatras recomiendan rebajar los biberones un poco, poniendo un tanto de agua por cada medida rasa de leche.

3. Otra opción son los baños con agua templada. Un beneficio para tránsito intestinal del bebé.

4. Los masajes también son muy estimulantes para ayudar a evacuar al bebé. Se puede flexionar las piernas del pequeño sobre el abdomen, haciendo movimientos circulares; colocar la mano sobre su intestino (a la altura del ombligo), y hacerle un masaje más profundo y en horizontal con la palma y la base de los dedos. Un masaje en su espalda, con movimientos de arriba abajo, también puede ayudarlo a evacuar.

5. Para bebés de más de 2 meses, se suele recomendar que les ofrezcan de 2 a 4 onzas de jugo de fruta, como uva, pera, manzana, cereza o ciruela, dos veces al día.

6. Si tiene más de 4 meses y ya consume alimentos sólidos, se le puede dar alimentos de bebé con alto contenido en fibra, como leguminosas, ciruelas secas, duraznos, peras, ciruelas frescas y espinacas, dos veces al día.

Por lo anterior, niños y adultos deben consumir suficiente fibra en la dieta. Las verduras, frutas frescas y secas, al igual que el trigo integral, el salvado o la harina de avena, son excelentes fuentes de fibra. Para incrementar estos beneficios, se debe tomar mucho líquido para ayudar a evacuar las heces.

Síguenos en @Salud180 y Salud180 en Facebook

¿Quieres recibir más información de tu interés? Regístrate con nosotros.