Bebé llenito no significa que esté sano

Además de crecer durante su primer año, los bebés viven un proceso interno del que dependerá su constitución física en la niñez, adolescencia y vida adulta: la formación de los adipositos (células que almacenan grasa).

El número de depósitos de grasa que desarrolla en los primeros 12 meses, lo acompañará toda su vida, por lo tanto a mayor número de adipositos, mayor la posibilidad de padecer sobrepeso u obesidad en cualquier etapa de su desarrollo.

Esto significa que un bebé que come más de lo debido, desarrollará mayor tejido graso que, conforme crezca irá aumentando de tamaño, si no se toman las medidas necesarias para controlar su alimentación.

“Gordito”

La idea de que un bebé “llenito” está sano aún prevalece entre las familias, esta asociación equivocada entre la complexión y la salud provoca que los padres no lleven el control de peso de su niño o niña, porque no consideran necesario las visitas periódicas al pediatra para el monitoreo en su peso y talla.

Como se explica en un comunicado de la División de Salud del PREVENIMSS, entre las consecuencias de mantener el sobrepeso y la obesidad está la dificultad para realizar actividades cotidianas, como sentarse, rodarse e incluso aprender a caminar; además el bebé será mucho más tranquilo, todo el tiempo querrá estar dormido o acostado, por lo que su desarrollo será mas lento.

Los expertos coinciden que el control de peso y monitoreo de talla, crecimiento y desarrollo del bebé, son condiciones básicas para convertirlos en adultos sanos. Te presentamos una tabla que te orientará en el desarrollo de tu bebé.

Peso en Kg. por edad; valores recomendados por la Norma Oficial Mexicana 031-SSA-1999 para la Atención a la Salud del Niño y la Organización Mundial de la Salud

¿Qué hacer si mi bebé sufre de sobrepeso u obesidad?

Existen dos causas fundamentales para el sobrepeso en bebés, ya sea fisiológico, una falla en el funcionamiento de las glándulas o la mala alimentación.

Por lo anterior algunos casos requieren de atención multidisciplinaria; si se trata de un problema de glándulas se debe de recurrir al endocrinólogo, así como el apoyo de un medico de rehabilitación para que diseñe un plan de ejercicios apropiados para el pequeño.

Empero, si el origen del problema es la alimentación, se puede moderar desde la cantidad de leche hasta el consumo de jugos y papillas bajo la asesoría de un nutriólogo.