Vacunas contra VPH son seguras
POR: Mariana Peña
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Hoy es posible reducir a la mitad el número de muertes por cáncer cérvico uterino (CCU) si se aplica la vacuna contra el virus del papiloma humano (VPH) a adolescentes de 12 a 16 años y se recurre a los nuevos métodos que permiten diagnosticar las lesiones precancerosas con mayor rapidez y eficiencia.
De acuerdo con el doctor Carlos Aranda, jefe del servicio de Oncología del Instituto Nacional de Perinatología de México, la vacuna, incluso, “puede disminuir la incidencia del cáncer cérvico-uterino en 70%”. De los más de 200 tipos de virus del papiloma humano que se conocen, sólo 40 afectan el sistema reproductivo femenino y, de éstos, 15 pueden ser la causa principal de CCU.
Los tipos de papiloma se clasifican por número: los 16, 18, 31, 45, 33, 58, 35, 59, 51, 56, 39, 72 y 82 están relacionados con el contacto sexual; de éstos, los virus 16 y 18 son los más graves. Según datos oficiales de la Agencia Internacional de Investigación para el Cáncer (IARC, por sus siglas en inglés), el VPH 16 es el causante de 50 a 60% de casos de CCU en el mundo y el VPH 18 lo es de 10 a 12%.
Efectividad de las vacunas contra el VPH
A pesar de algunas dudas que existen en relación a la efectividad de la vacuna contra el virus del papiloma humano, la comunidad científica internacional avaló recientemente su uso por su altísima seguridad y eficacia.
Según los resultados del mayor estudio clínico realizado hasta ahora y en el que participaron 18 mil 664 mujeres de 14 países del mundo, de entre 15 y 25 años de edad, la vacuna ha demostrado ser eficaz y segura en 98%. Las conclusiones de esta amplia investigación fueron publicadas en julio del año pasado por la prestigiada revista médica “The Lancet”.
Vacunas aprobadas
Se ha comprobado que las vacunas son efectivas solamente si se administran antes de la infección por VPH, por lo que se recomienda que se apliquen antes de que la persona sea sexualmente activa. Las dos vacunas aprobadas por la agencia estadounidense Food and Drug Administration (FDA, por sus siglas en inglés), son Gardasil y Cervarix, la primera para su uso en mujeres de 9 a 26 años de edad, y la segunda para mujeres de 10 a 25 años.
Según el laboratorio que las comercializa (Merck), la primera es altamente efectiva en hombres en la prevención de las verrugas genitales causadas por los VPH6 y VPH11, los dos tipos de virus que causan la mayoría de estos tumores benignos.
Además de los beneficios que existen en la prevención del CCU en mujeres y de la prevención de verrugas en mujeres como en hombres, es posible que haya beneficios adicionales de la vacunación, como una posible reducción del riesgo de padecer cáncer de ano, cáncer bucofaríngeo en hombres y mujeres, así como el de pene.
Tanto para aquellas que se han vacunado como para las que no lo han hecho, es importante que se sigan haciendo exámenes selectivos de detección de cáncer de cuello uterino. Según datos de la Secretaría de Salud, cada año mueren más de 5 mil mexicanas por causa de este mal. Un cálculo aproximado de las autoridades sanitarias prevé evitar la muerte de 3 mil 500 mexicanas al año, siempre y cuando se extienda el uso de la vacuna y ésta no sustituya otras pruebas.
La vacuna "no sustituye las citologías de diagnóstico como lo es la prueba de Papanicolau, las mujeres que reciben la vacuna contra el cáncer cérvico-uterino deben continuar con esta prueba como proceso de diagnóstico", añadió el doctor Aranda.