Hablemos de piojos: mitos y realidades de la pediculosis

La pediculosis es la infestación de piojos y liendres en la cabeza. Afecta primordialmente a niños en edad escolar, entre los 3 y los 12 años, y se manifiesta sobre todo en la parte de la nuca porque es donde hay mayor flujo sanguíneo y es en donde más se concentra el calor.  

La comezón suele ser la "primera señal" y es como frecuentemente detectamos la presencia de piojos. Sin embargo, "es muy importante revisar a los niños todos los días porque en primeras infestaciones no hay comezón, por eso tenemos que estar continuamente checando las cabecitas de nuestros niños", dijo la pediatra Wendy Picasso, vocera de Herklin. 

Cuando el pequeño tiene contacto primario con el piojo, el "animalito" anda por la cabeza sin que nos demos cuenta e inclusive puede tener liendres. "Cuando ya es infestación secundaria, la comezón es insoportable, pero al principio es probable que no nos demos cuenta tan fácil, sólo revisando", explicó Picasso.  

De acuerdo con la doctora, las liendres son de color blancas con un ligero tono marrón y se distinguen porque se adhieren con fuerza al cabello. "La puedes diferenciar de la caspa, por ejemplo, porque la caspa es suelta, son escamitas sueltas.  La liendre se ve perfectamente pegada al pelo, es un color un poco más marrón, en cambio la caspa es totalmente blanca. El piojo es un animalito café un poco más oscuro". 

La especialista señaló que la pediculosis es muy frecuente sobre todo después de los cursos de verano, en el regreso a clases, y la vía de contagio es por contacto directo: 

"Te contagias por contacto directo cabeza con cabeza, o por el contacto de la cabeza con objetos de uso personal como el peine, cepillos, diademas, moños, gorras y capuchas de chamarras. Es muy frecuente que en edad escolar los pequeños se presten todos estos objetos, por eso es más frecuente en niños que en adultos", comentó Picasso.  

La experta nos señaló algunos mitos sobre los piojos que es importante que se empecemos a eliminar: 

Mentira. La pediculosis no respeta clase social, puede presentarse en niños que asisten a escuelas públicas o privadas. No tiene que ver nada con el nivel socioeconómico.  

"Tal vez tienen mayor probabilidad quienes tienen contacto con muchas personas o niños que son más sociables, pero es indistinto, le puede pasar a cualquiera", señaló la pediatra. 

Otra falacia. No es de personas sucias, ni que no se bañen. Por el contrario, es más probable que los piojos se adhieran más cuando la cabeza está limpia. "Sí hay que bañarnos todos los días, pero no hay preferencia de los piojos entre cabezas limpias o sucias", puntualizó Wendy Picasso. 

No. Los piojos no vuelan, no saltan, ni andan en el aire.  El contagio es por contacto directo, cabeza con cabeza o con objetos infestados. Por ejemplo, cuando se abrazan o se toman la "selfie".

Ese es otro gran mito. Utilizar remedios como mayonesa, detergentes, chile, etc,  lejos de mejorar o quitar los piojos, puede tener un efecto tóxico en la cabeza de los niños.  

Por otro lado, antes las mamás rapaban a los niños, pero no es necesario llegar a estos extremos si se usan los tratamientos adecuados. Cortar el cabello puede ser traumático, más en las niñas. 

Los piojos pueden estar también en almohadas o la ropa de los pequeños. Un piojo sin alimentarse, fuera de la cabeza, puede sobrevivir hasta 36 horas. Es muy importante durante el tratamiento llevar un aseo profundo de toda la casa, de toda la ropa de cama, porque es cuando tenemos el contacto. Si pasan menos de 36 horas y vuelves a tener contacto, el piojo todavía está vivo y hay un re contagio.

No, es fundamental que todos los miembros de la familia usen productos contra los piojos. 

Más allá de llevar el cabello largo o corto, sí hay una mayor probabilidad cuando está suelto. Por eso se recomienda a los papás que los niños vayan con el cabello recogido e incluso hacer uso de repelentes.

"Lo que sucede es que los tratamientos no se están llevando a cabo de manera adecuada. Se debe usar un shampoo contra piojos en pelo seco durante 10 minutos, en TODA LA FAMILIAa, y repetirlo 7 días porque muchas veces se utilizan como cualquier shampoo comercial, menos de 5 minutos y no se repite el tratamiento, eso nos ha llevado a que no se logre acabar con la infestación", aseguró Picasso.

La desinformación y todos los mitos que hay alrededor de los piojos, ha llevado a que en muchas escuelas se aíslen a los niños con el problema o que los etiqueten.  

"Tenemos que entender que no tiene nada de malo, que es algo muy común que puede sucederle a cualquiera y que su tratamiento es sencillo y efectivo. Sólo hay que llevar a cabo las precauciones necesarias, es totalmente curable, hay tratamientos específicos, muy seguros. 

 "Es importante educar al paciente para que entienda que no es de gente que no se baña o sucia, sino que es totalmente normal en estas edades por la forma en que se tratan. También todos tenemos que educarnos para no ocultar cuando exista contagio, porque así evitamos que se siga propagando y se pueden tomar las medidas necesarias", concluyó Wendy Picasso.