Todo lo que debes saber sobre la lactancia

Amamantar nunca es tan fácil como parece en las películas. Es un proceso que para algunas mujeres puede ser frustrante y doloroso, especialmente si aparecen grietas o fisuras en el pezón.

Las grietas en los pezones aparecen cuando tu bebé no está amamantando en la posición adecuada, lo cual quiere decir que su boquita no está cubriendo suficiente superficie de la areola (el área de color más oscuro alrededor del pezón). 

Lo más importante que debes saber es que si sientes mucho dolor al amamantar o aparecen estas fisuras necesitas ajustar la forma en la que tu bebé toma el pezón. Puedes consultar a un especialista que te ayude a encontrar la posición correcta o tratar de corregirlo tú misma. 

Intenta dejar que tu seno cuelgue de forma natural y acerca a tu bebé sin forzarlo a tomar el pecho. Lo que debería suceder es que su barbilla toque tu piel y la presión provoque que naturalmente abra la boquita lo suficiente como para tomar correctamente el pezón.

Si no sucede y se “agarra mal” usa un dedo limpio para estimular gentilmente la comisura de su boquita, para que suelte el pezón y lo intente de nuevo. 

Cuando el bebé está bien “agarrado” no debes sentir dolor ni pellizcos. Solo una pequeña parte de tu areola debe quedar visible (en algunos casos nada, dependiendo del tamaño de tu pezón y su boquita), los labios de tu bebé quedan hacia afuera y su barbilla toca tu pecho. 

Si tu bebé está agarrando bien el pecho pero de todas formas te aparecen grietas en los pezones considera que lavarlos con agua y jabón antes o después de dar pecho puede provocar irritación. Lo único que tus pezones necesitan es que los lubriques con tu leche antes y después de cada toma. Exprime un poco de líquido y úsalo para humedecer la piel. 

Pero si las fisuras ya aparecieron, existen pomadas que te ayudarán a sanar más rápido y evitar la incomodidad. Busca alguna que tenga Dexpanthenol, ya que este activo regenera la piel, da un dar alivio a tu piel y sana rápidamente. ¡Revisa la crema para rozaduras de tu bebé! Conozco una que justo tiene éste ingrediente. 

Deja de amamantar con ese pecho y extrae la leche manualmente hasta que sane la fisura. 

¡No te desesperes! Tu pecho sanará y pronto podrás amamantar a tu bebé sin dolor. 

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