Masaje para nuestro cerebro

Cuando se escucha una melodía, el cuerpo tiende a seguir el ritmo. No hace falta una concentración profunda en lo que está ocurriendo, sino que debe dejarse que se produzca como una sintonía automática y sincrónica.

De esa manera, el efecto de la música se irá convirtiendo en una especie de masaje sónico que ayuda a eliminar las tensiones, provocadas por una vida cotidiana cargada de estrés y ansiedad.

El cerebro y la música

Ciertas pautas sónicas pueden generar ondas cerebrales alfa. Las ondas alfa, oscilan alrededor de 10 veces por segundo; éstas aparecen y desaparecen en nuestro cerebro, ¡exacto! no todo el tiempo están ahí. Por ejemplo durante el sueño profundo o en alguien que se encuentra enojado o con miedo no se producen ondas alfa.

Estas ondas se generan en el hemisferio izquierdo del cerebro, suelen apreciarse cuando estamos despiertos pero bajo un estado de alerta relajado y son las responsables de la relajación, tranquilidad, creatividad y alto rendimiento.

Los científicos han demostrado que la gente creativa presenta mayor producción de ondas alfa, también han visto que existen diferencias entre el deportista común y atletas ya que en ellos las ondas se incrementan significativamente antes de una competencia.

La capacidad de producir ondas alfa es innata, pero como consecuencia del estilo de vida estresante y acelerado que llevamos, nuestro cerebro ha ido olvidando como producirlas. Es por esto que fácilmente nos volvemos víctimas de la ansiedad y enfermedades relacionadas al estrés reduciendo nuestro sistema inmune, por lo que aumentar nuestra producción de ondas cerebrales es bueno para todos. Así que ponte cómodo, relájate, escucha tu música favorita y dale un masaje a tu cerebro.