¿Hidratas tu piel correctamente?

Compartir en Instagram se abrirá una nueva ventana
Guardar en Favoritos
Guardar en Favoritos
Para tener una piel hidratada se requiere de cuidados diarios, pero nunca se debe llegar a los extremos. / Fuente: Photos.com
Diana Oliva

POR: Diana Oliva

Estudió periodismo en la FCPyS. Es aficionada a la literatura clásica y su mayor pasión son los perros.

10-05-2013

Tener una piel hidratada, permite que la epidermis luzca una apariencia fresca, juvenil y lisa; un aspecto contrario cuando ésta sufre de deshidratación que se caracteriza, además de una falta de agua, por una textura tirante, arrugada y propensa a la descamación.

 

De acuerdo con el especialista Miquel Ribera, dermatólogo del Hospital Universitario de Sabadell y vice-presidente de la Academia Española de Dermatología y Venerología, para tener una piel hidratada  se requiere de cuidados diarios, pero nunca se debe llegar a los extremos.

 

Sin embargo, ¿qué favorece o perjudica tu piel? Salud180.com te presenta 3 mitos sobre las acciones que afectan la hidratación de tu piel: 

1. Mito. Beber mucha agua es suficiente para tener la piel hidratada.

 

Verdad. Para Annika Schrader, investigadora de Nivea, la cantidad de agua que bebas no tiene un efecto en la hidratación óptima de la epidermis. Uno de los factores más importantes es cómo se distribuye ésta en las diferentes capas de la piel. Así, aunque beber agua es importante, no es suficiente

 

2. Mito. La piel grasa no necesita hidratación.

 

Verdad. La mayor producción de sebo de estos cutis hace que su manto hidrolipídico sea más eficaz a la hora de frenar la deshidratación, pero esto no significa que siempre sea suficiente.

 

Hay muchas mujeres (especialmente las jóvenes), que pueden prescindir de la hidratante pero que con el tiempo y las condiciones externas (clima) necesitarán de ayudad extra.

 

3. Mito. El estrés es uno de los factores que más influye en el grado de hidratación de la piel.

 

Verdad. El especialista Ribera, en un estudio realizado por la empresa Dove, mencionó que se trata de una creencia errónea. Al estrés se le atribuye la responsabilidad de todos los males.

 

Si bien es cierto que el estrés es responsable de desencadenar o empeorar muchas enfermedades, en lo que respecta a la hidratación de la piel tiene una influencia mínima, y en caso de tenerla, ésta va en una dirección contraria.

 

El estrés aumenta la sudoración y la secreción sebácea, y en todo caso contribuye a que la piel sea más grasa.

 

Mantener una piel hidratada es esencial para tu apariencia, pero también para tu salud. Recuerda que la belleza refleja, no sólo tus hábitos, también tu bienestar emocional. ¡Cuídate y amate!
 

Compartir en Instagram se abrirá una nueva ventana
Guardar en Favoritos
Guardar en Favoritos
Lo que pasa en la red