¿Adicta a una mala relación?

¿Tienes una relación destructiva? Sí, sabes que ese chico es sinónimo de problemas y eres muy consciente de lo mal que te sientes. Sin embargo, por la razón que sea, no parece que te puedas alejar de él.

Quizá es la esperanza de que algún día cambiará y se convertirá en el novio perfecto o probablemente ya te acostumbraste a los altibajos de su relación, es mejor que reflexiones si lo amas o eres adicta a él.

La razón que sea para que te quedes en una relación destructiva, puede hacerte sentir como una adicta más, ¿cierto?  ¿Pero cómo superar esta enfermedad emocional? Aquí te ofrecemos cinco pasos para lograrlo.

Paso 1: Admite. Como en cualquier otra adicción, el primer paso es admitir el problema que tienes. Analiza objetivamente la relación y no como a ti te gustaría que fuera. Si continuamente te sientes herida, decepcionada, con miedo o poco apreciada, definitivamente no estás en una buena relación. Acepta de una buena vez, que la única persona a la que puedes cambiar, eres tú.

Paso 2: Desintoxícate. Esta es la parte difícil y lo mejor para salir de una relación destructiva es cortar de tajo. Esto significa que cuando acaba, acaba. Nada de “vamos a ser amigos”, ni de continuar solamente con el aspecto sexual de la relación, es lo mejor. Al principio el dolor será inmenso, pero no se compara con el que sentirás cuando te deje en la cama, después de un encuentro físico, para irse con su novia.

Paso 3: Pide ayuda. Para vencer una adicción, del tipo que sea, necesitas del apoyo de otros. Busca a un amigo en el que confíes ciegamente, que sepas que busca tu mejoría y tu felicidad, que sea capaz de aconsejarte y que tenga la fuerza para ayudarte a seguir en el buen camino, cada vez que quieras contactar a tu ex.

Cuando sientas que tu voluntad flaquea, llama a esa persona y habla con ella. Encontrarás que este ejercicio es liberador e importante.

Paso 4: Cambia. Es momento de remplazar los comportamientos negativos por otros positivos. Mejora tu alimentación, comienza a ejercitarte, dedícale tiempo a un hobbie, etc.

Todo esto es importante para que comiences a recuperar tu vida, comenzarás a ver mejor las dinámicas de una relación positiva y descubrirás una fuerza interior que habías olvidado.

Paso 5: Comparte. Uno de los regalos más grandes que se puede dar el ser humanos es la experiencia de compartir sus experiencias, ideas, pensamientos, miedos y por supuesto su compasión. Cuando comiences a sanar y a sentirte más fuerte, ofrece tu hombro a otra mujer que esté pasando por una relación como la que tuviste.

Esto no sólo le va a dar más poder, además te ayudará a seguir en tu propio camino a la felicidad lejos de ese hombre.