7 tips para cuidar una sonda vesical

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Sonda para incontinencia urinaria
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POR: Salud180.com

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20-02-2016

Las sondas vesicales o urinarias se usan para drenar la vejiga y un médico puede recomendar su uso en caso de incontinencia urinaria (escape o incapacidad de controlar al orinar), retención urinaria (ser incapaz de vaciar la vejiga cuando se necesita); cirugía en la próstata o los genitales, u otras afecciones médicas como esclerosis múltiple, lesión de la médula espinal o demencia.

 

Una sonda vesical permanente es una que se coloca en la vejiga y se puede usar sólo por un tiempo corto o durante mucho tiempo, por lo que se fija a una bolsa de drenaje para recolectar la orina. Un tipo de sonda más nuevo tiene una válvula que puede abrirse para dejar que la orina salga.

 

Sin embargo, algunas veces, puede haber un escape de orina alrededor de la sonda vesical, lo cual puede ser causado porque está obstruida o tiene un retorcimiento, es demasiado pequeña, por espasmos vesicales, estreñimiento, tamaño inadecuado del globo o por infecciones urinarias.

 

Las complicaciones del uso de una sonda vesical abarcan alergia o sensibilidad al látex, cálculos renales, infecciones de la sangre (septicemia), sangre en la orina (hematuria), daño o infección renal, e incluso, lesión uretral.

 

 

Tips para un buen mantenimiento de la sonda vesical

 

1. Beber al menos de 1.5 a 2 litros de líquidos al día para provocar abundante orina y evitar que se formen residuos en la vejiga y se tapone la sonda.
2. Lavarse las manos con agua y jabón para manipular la sonda o bolsa.
3. Lavar todos los días el pene o la zona genital para que no se le forme barrillo alrededor de la sonda, evitando infecciones.
4. Asegurarse que la bolsa esté bien conectada a la sonda para evitar pérdidas de orina.
5. Vigilar que el tubo de la sonda o bolsa no esté doblado, para que no se impida el paso de orina.
6. Por la noche, tenerla conectada a la bolsa para no levantarse y que la vejiga se vacíe bien.
7. La bolsa de drenaje debe permanecer siempre a un nivel más bajo que la vejiga para prevenir un retroceso del flujo urinario hacia la vejiga. El dispositivo de drenaje se debe vaciar por lo menos cada 8 horas o cuando esté lleno.

 

La mayoría de los expertos están en contra del cambio rutinario de los catéteres, salvo que el catéter esté obstruido, produzca dolor o esté infectado. Estas recomendaciones pueden evitar infecciones importantes y la sonda puede durar más tiempo sin necesidad de cambiarla.

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